El miércoles 4 de diciembre, los 8° Básicos participaron en una emotiva Eucaristía que marcó el cierre de su etapa de Enseñanza Básica. Acompañados por sus familias, profesores y compañeros, agradecieron a Dios por los aprendizajes, las amistades y las experiencias compartidas durante estos años.
Durante la ceremonia, las y los estudiantes recibieron una piocha, signo que los invita a vivir el lema de nuestro colegio, “En todo amar y servir”. Este gesto simboliza el llamado a enfrentar los desafíos de la educación media con compromiso, responsabilidad y el propósito de ser agentes de cambio en la sociedad.
En esta nueva etapa, como comunidad educativa los acompañamos con el sueño de que se conviertan en “hombres y mujeres con el estilo de Ignacio: contemplativos en la acción, capaces de integrar la oración y búsqueda de la voluntad de Dios, los grandes sueños e ideales de su corazón, la vida real, la acción de servicio y el compromiso consigo mismo, las demás personas y el mundo que les toca vivir” (Proyecto Educativo NSDC).